BALA PERDIDA
Para hacer más dinámica esta historia de abuelo cebolleta, y contar la vida del grupo, lo relataré en primera persona y siempre desde mi experiencia y punto de vista. Me presento: soy David Fernández, cantante del grupo.

Todo empezó en el verano del 2008, cuando en un viaje en metro, dos amigos y yo nos dimos cuenta de que los tres sabíamos música, y podríamos juntarnos los fines de semana a tocar. En ese momento nos pareció la mejor de las ideas y nos pusimos en movimiento. Aquellos dos amigos eran Javier Arzamendi, primer bajista del grupo, e Iker López, guitarra solista. Después de ofrecerme como guitarra y cantante, ya solo nos quedaba encontrar un batería.

El puesto de batería llevaba el nombre de Fran Díaz antes de que el mismo lo supiera. Antes de formar parte de la banda era ya una persona a la que podía llamar amigo con todas las letras, así que sólo hizo falta una llamada de teléfono, y la semana siguiente alquilamos un local por horas y nos juntamos a ver que podíamos sacar de aquello.

Unas semanas después, Iker nos habló de un compañero de conservatorio que sabía tocar el piano y el saxofón, y pensó que le podía venir bien al estilo que tocábamos. Entre tanto ya habíamos comenzado a componer nuestros propios temas, y cuando vimos la destreza, del que luego fue teclista de la banda durante muchos años, no pudimos decirle otra cosa más que bienvenido. Con la incorporación de Víctor Fernández al grupo, completamos la primera formación del grupo, y añadimos a un buen amigo a la lista.

Pasó el tiempo, y aunque no tengo claras las fechas, puedo decir que nada es para siempre, y chocamos tanto en carácter el guitarra solista y yo, que decidió abandonar el grupo. En aquel momento no fue nada trágico, y no quiero que mis palabras se malinterpreten, me explicaré: no había compromisos de conciertos, aún la banda no tenía los cimientos fuertes y, para lo que hacíamos en aquel momento, y que sabían de la existencia del grupo 5 ó 6 personas, podíamos seguir adelante sin él.

Cuando el grupo comenzó a tomar algo de seriedad, las cosas volvieron a ponerse tensas. Nos faltaba un guitarrista, el bajista de por aquel entonces no tenía el mismo concepto de trabajo que el resto de la banda, y cuando llegamos a un acuerdo, vino para mí el momento más duro que puedo recordar en cuanto a decisiones se refiere. Por primera vez tuve que decirle a una persona que íbamos a prescindir de él.

Nos quedamos entonces con una mesa de dos patas, aquello era insostenible, y faltaban en igual medida música y ánimos. Retomando la crónica, sí recuerdo que en este punto nos encontrábamos en el verano del año 2011. Decidí por el bien del grupo que ese verano no volveríamos a tocar hasta septiembre, y di mi palabra de que para aquel entonces aparecería en la sala con un guitarrista y un bajista y podríamos seguir a lo nuestro. Poco tardé en encontrar al actual bajista Gaizka Lombera. Ya sabía que era músico, así que solo esperé a cruzarme con el por la calle, proponerle un puesto en el grupo y esperar a que aceptara.

En cuanto al guitarrista, Wilmar Díaz, para no entrar en batallas personales y que el relato tome un aire demasiado subjetivo, solo diré que tal y como vino, un año después le invitamos a irse. No obstante, aquel no fue para nada un mal año y conservo recuerdos y anécdotas. Sin ir más lejos Wilmar, nos dejo 55 recuerdos contantes y sonantes, y dudo que algún día los podamos olvidar.

Estábamos en auge, componíamos muchas canciones, dábamos conciertos hasta acabar agotados. En ocasiones días seguidos en distintos antros, cargando y descargando, montando y volviendo a desmontar. Tomó seriedad el grupo en aquel año y nos hacíamos llamar Materia Prima, y como ya nos pasó antes, el nivel al que llegamos nos superó como guitarristas tanto a Wilmar como a mí.

Yo que me di buena cuenta de que el puesto de guitarrista me venía grande, decidí centrarme solo en cantar y comencé a buscar dos guitarristas para los puestos vacantes. Cuando los puestos se cubrieron, hacia el verano del 2012, dedicamos meses a enseñarles el repertorio de canciones a Víctor Blanco, y Mikko.

Pasó entonces, que Víctor Fernández acabó los estudios de música por los que estaba viviendo aquí, y con muchísimo pesar para todos, empaquetó sus cosas, llenó la maleta y volvió a Galicia, su tierra natal. Su puesto no era el de un simple teclista, era el puesto de Víctor Fernández, y como no hay otro Víctor Fernández que ocupe su lugar, esa plaza no la volverá a cubrir nadie más que él.

Desde ese verano y hasta la fecha pocos conciertos hemos dado, por situaciones que vinieron juntas. Mikko se fue a vivir una temporada a Houston, en el estado de Texas, y a su regreso nos sumergimos en el proyecto de grabar una maqueta por nuestra cuenta y riesgo que nos llevó muchas horas de trabajo y desgaste mental, que no todos los miembros de la banda supieron llevar de la misma forma. A demás de eso, para poder darle a la maqueta el nombre de grupo, tuvimos que cambiarlo para inscribirnos en el registro. Ese día le pusimos nombre propio a toda la historia: Bala Perdida.

Pero siempre ocurre que cuando un músico le empieza a dar demasiadas vueltas al hecho de pertenecer al grupo, o el grupo empieza a pensar demasiado en un músico, el resultado final suele ser que ese músico cruza la puerta del local para no volver. Víctor Blanco se fue para no volver, y después de tantas veces que pasa, acaban siendo solo muescas en la culata. Mas importante que encontrar buenos músicos para la banda es encontrar buenas personas, y hablando del tema, Borja Gorostiza ocupó la plaza vacante tres días después de la partida del guitarrista que le precedió.

A día de hoy han pasado muchos músicos por el grupo que ahora se llama Bala Perdida, otros tantos han colaborado con nosotros en conciertos, y tantos años después me encuentro escribiendo la historia del grupo para la página web, con un taco de 80 maquetas a mi izquierda listas para acomodarse en las baldas de los que ahora leen esto. Es un viaje lento, pero cada paso que damos es tan firme, que es imposible que retrocedamos. Siempre caminamos en la misma dirección llueva, granice o nieve.
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THE RISE

Nacimos un día de Halloween, en 2008 y teniendo 12 años. Después de un tiempo con ensayos algo catastróficos, empezamos a hacer algo a lo que se le podía llamar música, versiones de grupos que nos gustaban (The Offspring, Ramones, NOFX…) Aunque con un estilo bastante variado y sin definir.
Estábamos formados por Eneko (voz), Gaizka y aitor (Guitarras), Josu (Bajo) e Iyan (Batería). En un par de años Josu decidió dejarlo, y Eneko se puso al Bajo.
A lo largo del tiempo fuimos progresando, asentandonos en la energia del Punk-Rock con mucha carga melodica en las voces.Pese a que al principio pensamos en componer musica principalmente en Ingles, la idea fue desechada por su poca practicidad a la hora de transmitir al publico,por lo que decidimos centrarnos en el Euskera y el Castellano.Empezamos a componer, temas en inglés y alguno en castellano, y en 2012 grabamos una maqueta compuesta por tres canciones, disponibles gratuitamente en nuestro canal de YouTube o en SoundCloud.
Actualmente estamos formados por Eneko (Bajo y voz), Gaizka (Guitarra solista y voz), Aitor (Guitarra rítmica y coros) e Iyan (Batería) en proceso de nuestra segunda maqueta, con temas potentes en castellano y euskera, y unas buenas ganas de meter ruido.
https://soundcloud.com/the_rise

Aupa Chavales! Aqui esta nuestro nuevo tema "NEGAR TANTAK" para que lo escucheis y lo descargeis (En Soundcloud)

Kaixo lagunok! Hemen dekozue gure abesti berria "NEGAR TANTAK" entzun eta deskargatzeko (Soundcloud-en)

YOUTUBE:http://www.youtube.com/watch?v=BgfOWUpz7PY&feature=youtu.be
SOUNDCLOUD:https://soundcloud.com/the_rise/the-rise-negar-tantak